*24.44.-La mala hora del gabinete petrista – RAMIRO BEJARANO
* ¿Perseguido o persecutor de la Fiscalía Camargo? – CECILIA OROZCO
*Error de cálculo, impunidad eterna – YOHIR AKERMAN
En los profundos análisis que se han hecho hasta ahora de la impresentable sentencia absolutoria del ganadero Santiago Uribe Vélez, un aspecto crítico ha pasado inadvertido: el error, premeditado o involuntario, en el cálculo del término de prescripción de la acción penal. Este es un tema muy sencillo, pero muy técnico. Muy simple, pero con consecuencias gravísimas. Un descuido que no parece un descuido, sino más bien una maniobra cuidadosa para conducir al camino de la impunidad.
Empecemos. El juzgado primero penal del circuito especializado de Antioquia, en su decisión del pasado 13 de noviembre cometió una falta sustancial, al determinar la fecha de interrupción de la prescripción, hecho que tiene graves implicaciones para el futuro del proceso penal.